¡Hola, Mamás del Club de Ayuda!
¡El amor de Dios! ¿Acaso puede ser más hermoso, maravilloso e infinito? ¿Acaso podemos siquiera comprender su grandeza? El gran amor de Dios se ilustra muchas veces en la Biblia, nuestra fuente de Verdad. Uno de los versículos más citados es: «Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna» (Juan 3:16). También, en Romanos 5:8 (NTV): «Pero Dios demostró su gran amor por nosotros al enviar a Cristo a morir por nosotros cuando aún éramos pecadores». Además, en 1 Juan 4:16 (RVR1960): «Así que hemos llegado a conocer y creer el amor que Dios tiene para con nosotras. Dios es amor, y el que permanece en amor permanece en Dios, y Dios permanece en él».
¡Ahora es el momento de que cada una de nosotras reflexione sobre el concepto de permanecer en el gran amor de Dios por nosotras! Tómate un momento para reflexionar sobre “cuán ancho, largo, alto y profundo es el amor de Cristo” (Efesios 3:18).
Una manera de ayudarnos a ver el amor de Dios por nosotros es cambiar nuestra perspectiva sobre cómo lo percibimos. ¿Es un ser distante y abstracto que simplemente supervisa nuestra vida, o está más cerca, más cerca de nosotras, con nosotras, como nuestro Padre, nuestro Papito?
Irónicamente, fue durante una conversación que tuve con mi propio padre que comencé a comprender este concepto de Dios como mi Padre, mi Papito. Hablamos de cómo hay momentos en que clamamos a Dios y podemos usar diferentes nombres para Él: Jesús, Señor, Padre, Abba, etc. Entonces, caí en la cuenta de que a veces clamamos a Él como un hijo a sus padres: Mamá, Mamá, Mamitaaaa. Como madres, sabemos que cada uno de esos nombres, y la forma en que se pronuncian, significa algo diferente. Podemos notar cuándo nuestros hijos están tristes, heridos, felices o temerosos. ¿No es hora de conversar con Dios de esta manera? Clamarle: “Papá, te necesito…” o “Papá, creo que acabo de cometer un error”. Así, Dios se acerca más a nosotros. Empezamos a verlo como alguien que nos comprende y alguien en quien podemos confiar cuando necesitamos consuelo, consejo y, sí, amor. En palabras de Jesús en Mateo 6:8b (NTV): “…porque su Padre sabe exactamente lo que necesitan, incluso antes de que se lo pidan”.
No importa cómo sea nuestra relación con nuestro padre terrenal, ¡nuestro Padre celestial quiere tener nuestro amor y conocernos! Después de todo, estamos llamados en Juan 15:9 (ESV) a permanecer en su amor, y la manera de hacerlo es explorando la profundidad del gran amor de nuestro Padre por nosotras,
Bendiciones y amor,
Kristall Willis y el equipo del Club de Ayuda para Mamás
🌸 ¿Necesitas aliento en tu jornada como mamá?
No estás sola. Únete a nuestro Grupo en Línea de Facebook: Club de ayuda para mamás y escucha nuestros podcasts llenos de esperanza, fe y consejos prácticos para el día a día.
💬 Comparte, aprende y crece junto a otras mujeres que, como tú, desean criar con propósito y amor.
¡Te esperamos con los brazos abiertos! 💕
- Living a Lifestyle of Prayer: The Power of Praying Over Your Home - November 9, 2025
- De mamá a mamá con Kristall - September 9, 2025
- Mom to Mom with Kristall - September 7, 2025

